Por Juan Manuel Álvarez
Las ventas para algunos comerciantes establecidos en el centro de la ciudad son variables, el Quinto Festival Internacional de Cine de Morelia, ha favorecido sólo a unos cuantos negocios, principalmente a los ubicados dentro del primer cuadro de la ciudad, entre ellos se encuentran los hoteles, cafés, bares, restaurantes más populares y pequeñas tiendas de souvenirs (recuerditos) artesanales.
Un lugar tradicional repleto de comerciantes no beneficiados con el festival de cine y que además se encuentra a escasos metros de esta sede, es el famoso Mercado de Dulces, donde vendedores expresan lo siguiente:
'Los que vienen al festival casi no visitan este mercado, y los pocos que entran sólo observan y no compran nada; nuestras ventas no han aumentado, siguen igual de bajas, hace falta mayor publicidad para que se le proporcione al turista y asista al Mercado de Dulces', comentaron, Fernando Martínez y Julio Cesar Medina.
La señora Norma Guerrero también lamenta la poca venta de sus productos y expone su preocupación: 'A nosotros no nos beneficia este festival, la gente extranjera pasa muy poco por este lugar y necesitamos que se nos haga publicidad para aumentar nuestras ventas'
En el mercado San Agustín tampoco se ha notado un cambio favorable. Ramiro Medina, propietario de una marisquería establecida en ese sitio, expresó: 'Nosotros no aprovechamos gran cosa de este festival'.
La señorita Erica Leticia Hernández Mendoza, encargada de una Boutique, comentó: 'A nosotras no nos ha beneficiado el festival, nuestras ventas han estado normales'.
En contraste Jaime Ríos Corona dueño de una Joyería, explica: 'Si nos ayuda cada año la realización del festival y todos los eventos de este tipo que llegan a Morelia son algo bueno, porque llega buen turismo y a consecuencia hay buena derrama económica'.
Pero los comercios más concurridos por los visitantes nacionales y extranjeros, son los ubicados en lo que comúnmente se le conoce como Los Portales, allí, Maritza Mora, gerente de un café muy popular, señala: 'Desde que comenzó el festival nuestras ventas van superbien y han aumentado aproximadamente un sesenta por ciento, aparte llega mucho extranjero que consume más que la propia gente de Morelia'.
El señor Salvador Cisneros López, dueño de un céntrico puesto de revistas Agregó: 'Mis ventas han aumentado un veinte por ciento con este festival, debido a que hay más gente'.
Las opiniones están divididas, pero no se puede negar la buena imagen obtenida internacionalmente con eventos culturales de esta clase. Referente al desarrollo económico, siempre será paulatino y habrá sectores que se beneficien más que otros.
Las ventas para algunos comerciantes establecidos en el centro de la ciudad son variables, el Quinto Festival Internacional de Cine de Morelia, ha favorecido sólo a unos cuantos negocios, principalmente a los ubicados dentro del primer cuadro de la ciudad, entre ellos se encuentran los hoteles, cafés, bares, restaurantes más populares y pequeñas tiendas de souvenirs (recuerditos) artesanales.
Un lugar tradicional repleto de comerciantes no beneficiados con el festival de cine y que además se encuentra a escasos metros de esta sede, es el famoso Mercado de Dulces, donde vendedores expresan lo siguiente:
'Los que vienen al festival casi no visitan este mercado, y los pocos que entran sólo observan y no compran nada; nuestras ventas no han aumentado, siguen igual de bajas, hace falta mayor publicidad para que se le proporcione al turista y asista al Mercado de Dulces', comentaron, Fernando Martínez y Julio Cesar Medina.
La señora Norma Guerrero también lamenta la poca venta de sus productos y expone su preocupación: 'A nosotros no nos beneficia este festival, la gente extranjera pasa muy poco por este lugar y necesitamos que se nos haga publicidad para aumentar nuestras ventas'
En el mercado San Agustín tampoco se ha notado un cambio favorable. Ramiro Medina, propietario de una marisquería establecida en ese sitio, expresó: 'Nosotros no aprovechamos gran cosa de este festival'.
La señorita Erica Leticia Hernández Mendoza, encargada de una Boutique, comentó: 'A nosotras no nos ha beneficiado el festival, nuestras ventas han estado normales'.
En contraste Jaime Ríos Corona dueño de una Joyería, explica: 'Si nos ayuda cada año la realización del festival y todos los eventos de este tipo que llegan a Morelia son algo bueno, porque llega buen turismo y a consecuencia hay buena derrama económica'.
Pero los comercios más concurridos por los visitantes nacionales y extranjeros, son los ubicados en lo que comúnmente se le conoce como Los Portales, allí, Maritza Mora, gerente de un café muy popular, señala: 'Desde que comenzó el festival nuestras ventas van superbien y han aumentado aproximadamente un sesenta por ciento, aparte llega mucho extranjero que consume más que la propia gente de Morelia'.
El señor Salvador Cisneros López, dueño de un céntrico puesto de revistas Agregó: 'Mis ventas han aumentado un veinte por ciento con este festival, debido a que hay más gente'.
Las opiniones están divididas, pero no se puede negar la buena imagen obtenida internacionalmente con eventos culturales de esta clase. Referente al desarrollo económico, siempre será paulatino y habrá sectores que se beneficien más que otros.
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